Cuando uno visita el Museo do Mar de Galicia, en Alcabre, en su visita, contemplando las construcciones prerromanas que puede ver en la parte exterior del mismo, se da cuenta que se encuentra en un antiguo poblado castreño y a juzgar por la entidad de los hallazgos arqueológicos, de cierta importancia. Y saca la conclusión adecuada, pues en ese lugar, denominado "Punta do Muiño de Vento", existió en los últimos siete siglos anteriores a nuestra era, un importante emplazamiento castreño, de los más antiguos y mejor conservados de nuestra comarca.
Lo que puede que el visitante ignore. es que al otro extremo de la playa de "O Cocho", que así se denomina el pequeño arenal que se extiende a sus pies, en dirección norte, se localizó hace ya tiempo, una villa romana, en la denominada "Punta Borralleiro", de la que se pudo documentar un esquina de una edificación con buenos sillares y hasta restos de una pileta de salazón, así como diversos material cerámico romano que data este enclave hacia el siglo III-IV después de Cristo, aproximadamente.
No deja de sorprender la semejanza con lo acontecido, en Oia, con el castro de la isla de Toralla y la villa del mismo nombre, ya en tierra firme. Los castros son muy similares en todas sus características fundamentales: igual tipo de construcción; materiales cerámicos indígenas e importados del sur con muchos paralelismos;... y fueron abandonados hacia el cambio de era. Las villas, situadas cercanas a los mismos ( ahí que pensar que la isla de Toralla, en aquel entonces, estaba más unida al litoral que ahora ), presentan también muchas características en común, a pesar de que la encontrada en Alcabre, al no ser objeto de nuevas excavaciones arqueológicas, la información sobre la misma es más escasa: igual tipo de sistema constructivo; materiales cerámicos iguales;...
Podemos ver como existe un abandono de un poblado que posiblemente ya perdío la función para el que fue concebido y el nacimiento de un nuevo tipo de asentamiento desconocido en nuestra zona, como son las villas romanas, con sistemas de producción ecónomicas más complejos, como es el caso, de las salinas en Toralla y la fabricación de salazón en Alcabre aunque mantendrán la economía agropecuaria como su principal fuente de riqueza.
Y para finalizar esta pequeña reflexión en voz alta, acordarnos de la existencia de una necrópolis en la isla de Toralla, que con toda claridad podemos documentar que posee la misma cronología que la villa o dicho de otro modo, que fue utilizada en los tiempos que duró la vida en la villa y en Alcabre poseemos noticias vagas que en una zona cercana al castro, fueron encontrados enterramientos, que bien podrían pertenecer a la necrópolis de los habitantes de la villa que se encuentra en el otro extremo.
Pienso que no sólo para un arqueólogo es importante el dato de esos enterramientos posteriores en poblados abandonados por los antiguos habitantes de los mismos, con nuevas creencias y ritos funerarios, sino sobretodo para los etnógrafos y etnólogos, así como para cualquier investigador de las antiguas religiones, el poder comprobar esta circunstancia y darle una explicación convincente, que nos pueda acercar más a conocer el pensamiento de nuestros antepasados, pues es esa la verdadera razón y objetivo de esta ciencia y no sólo el documentar (como un notario) el hallazgo de los restos arqueológicos que vayan apareciendo,...
Nota.- En la fotografía inferior, restos de las construcciones castreñas de "Punta do Muiño do Vento" y abajo, parte de la villa romana de "Punta Borralleiro" ( hoy tapada ), que se encuentran cada uno de ellos, en los extremos, de la playa de "O Cocho" en Alcabre.
martes, 8 de septiembre de 2009
jueves, 3 de septiembre de 2009
VIVIENDAS PARA DURAR SIGLOS EN EL CASTRO DE VIGO
Una de las primeras preguntas que se plantea un visitante a un castro gallego es el tema de las entradas a las casas. De principio, a primera vista, podemos decir que existen numerosas construcciones que observamos en las que no podemos ver con claridad donde podría estar su puerta. La respuesta más inmediata que viene a la cabeza es que utilizarían escaleras para subir a ellas...
Pero el tema es más lógico y tiene su explicación. Primero no todas las construcciones que vemos en un castro corresponden a casas, si no que pueden tratarse de almacenes o silos, que poseen muros altos para evitar la entrada de animales y tener mejor ventilación y que poseían la entrada en la parte superior de los mismos, como podemos constatar en otras culturas y civilizaciones. Pero a la hora de tener documentada una casa ( pues en su interior hemos encontrado, por ejemplo, su hogar,..) el problemas de los altos muros y la no existencia de un hueco para la entrada a la misma, tenemos que resolverlo de otra forma y con otro planteamiento: lo que estamos viendo son los cimientos de las casas y no sus paredes. Luego de esos potentes cimientos, nos vendría, en la parte superior de los mismos, el piso o pavimento de funcionamiento u ocupación de la misma, con su correspondiente hogar, huecos de poste en ocasiones,...
Todo ello lo tenemos bien reflejado en la mayoría de las casas localizadas en el castro de Vigo. Sobre todo en el período de mayor apogeo o esplendor que se dará desde el siglo I antes de Jesucristo al I después de Jesucristo, estas viviendas de planta circular o elíptica, poseerán profundos cimientos, que llegarán a la roca base del monte, procurando darle a la misma, una mayor estabilidad y resistencia al paso del tiempo. No se construye para unos años sino para unos cuanto siglos.
Lo podemos ver graficamente en la fotografía que aparece reproducida en la cabecera de este comentario y que nos muestra los restos de una vivienda de planta elíptica con un pequeño anexo, situado en su entrada, localizada en una de las campañas realizadas en la zona a mediados de los 80 del siglo pasado . Lo que tenemos en la parte central de la casa, es el hogar o "lareira", que nos viene definido por un espacio rectangular, formado por piedras hincadas y conservando la arcilla endurecida al fuego en su interior. Este hogar estaba sobre un pavimento que fue retirado para excavar los cimientos. Y estos cimientos son los que ven en primer plano, pues si analizan la altura del hogar y también los restos de la roca base al fondo, llegamos a esa conclusión. El buen acabado del aparejo nos plantea eso si otra cuestión: ¿estaban estos cimientos tapados por tierra o no estaban ocultos y se podían ver perfectamente, aunque correspondiesen a los cimientos de la casa?. Creo que esta pregunta tiene diferentes respuestas que sólo las dan cuando se están realizando las excavaciones arqueológicas. Un tema a considerar y a tener muy en cuenta para decidirse por una respuesta u otra, son los desniveles que pueden general estos "cimientos visible", que dependiendo de su situación, dentro del poblado estaría o no ocultos.
Para acabar una pequeña reflexión, que va pareja a estos potentes cimientos: ¿ y los muros de las casas donde están?. La respuesta es bastante bien sencilla: al ser abandonado el poblado, las casas se van desmoronándose con el tiempo y al final, sobre el piso de las mismas se han acumulado las piedras procedentes del derrumbe de los citados muros. Y tenemos entonces, que el poblado se convierte en una "extraordinaria y abundante cantera" ya con la piedra cortada y lista para transportar y hacer nuevas construcciones. Luego de despojar el pavimento de todas las piedras de los muros, estos continúan hacia los cimientos, pero para sacar esa piedra es más complejo, pues hay que cavar una zanja y por ello, se van a la siguiente casa a por la piedra....Y luego de muchos siglos llegan los arqueólogos que lo máximo que van a encontrar, con suerte, las últimas hiladas de los muros, el piso y por debajo, los cimientos milenarios.
Pero el tema es más lógico y tiene su explicación. Primero no todas las construcciones que vemos en un castro corresponden a casas, si no que pueden tratarse de almacenes o silos, que poseen muros altos para evitar la entrada de animales y tener mejor ventilación y que poseían la entrada en la parte superior de los mismos, como podemos constatar en otras culturas y civilizaciones. Pero a la hora de tener documentada una casa ( pues en su interior hemos encontrado, por ejemplo, su hogar,..) el problemas de los altos muros y la no existencia de un hueco para la entrada a la misma, tenemos que resolverlo de otra forma y con otro planteamiento: lo que estamos viendo son los cimientos de las casas y no sus paredes. Luego de esos potentes cimientos, nos vendría, en la parte superior de los mismos, el piso o pavimento de funcionamiento u ocupación de la misma, con su correspondiente hogar, huecos de poste en ocasiones,...
Todo ello lo tenemos bien reflejado en la mayoría de las casas localizadas en el castro de Vigo. Sobre todo en el período de mayor apogeo o esplendor que se dará desde el siglo I antes de Jesucristo al I después de Jesucristo, estas viviendas de planta circular o elíptica, poseerán profundos cimientos, que llegarán a la roca base del monte, procurando darle a la misma, una mayor estabilidad y resistencia al paso del tiempo. No se construye para unos años sino para unos cuanto siglos.
Lo podemos ver graficamente en la fotografía que aparece reproducida en la cabecera de este comentario y que nos muestra los restos de una vivienda de planta elíptica con un pequeño anexo, situado en su entrada, localizada en una de las campañas realizadas en la zona a mediados de los 80 del siglo pasado . Lo que tenemos en la parte central de la casa, es el hogar o "lareira", que nos viene definido por un espacio rectangular, formado por piedras hincadas y conservando la arcilla endurecida al fuego en su interior. Este hogar estaba sobre un pavimento que fue retirado para excavar los cimientos. Y estos cimientos son los que ven en primer plano, pues si analizan la altura del hogar y también los restos de la roca base al fondo, llegamos a esa conclusión. El buen acabado del aparejo nos plantea eso si otra cuestión: ¿estaban estos cimientos tapados por tierra o no estaban ocultos y se podían ver perfectamente, aunque correspondiesen a los cimientos de la casa?. Creo que esta pregunta tiene diferentes respuestas que sólo las dan cuando se están realizando las excavaciones arqueológicas. Un tema a considerar y a tener muy en cuenta para decidirse por una respuesta u otra, son los desniveles que pueden general estos "cimientos visible", que dependiendo de su situación, dentro del poblado estaría o no ocultos.
Para acabar una pequeña reflexión, que va pareja a estos potentes cimientos: ¿ y los muros de las casas donde están?. La respuesta es bastante bien sencilla: al ser abandonado el poblado, las casas se van desmoronándose con el tiempo y al final, sobre el piso de las mismas se han acumulado las piedras procedentes del derrumbe de los citados muros. Y tenemos entonces, que el poblado se convierte en una "extraordinaria y abundante cantera" ya con la piedra cortada y lista para transportar y hacer nuevas construcciones. Luego de despojar el pavimento de todas las piedras de los muros, estos continúan hacia los cimientos, pero para sacar esa piedra es más complejo, pues hay que cavar una zanja y por ello, se van a la siguiente casa a por la piedra....Y luego de muchos siglos llegan los arqueólogos que lo máximo que van a encontrar, con suerte, las últimas hiladas de los muros, el piso y por debajo, los cimientos milenarios.
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